Baja el precio de los fletes.

Se estabilizan las exportaciones

Después de dos años de récords en los precios de los fletes, todo apunta a una estabilización de las exportaciones marítimas. Antes de la pandemia enviar un contenedor de China a EEUU tenía un precio medio de 2.000 dólares, después pasó a 20.000 dólares. El costo se disparó debido a la saturación de los puertos y falta de suministro de contenedores. En el último trimestre, los precios han caído un 20% y parece que no dejan de bajar. Esto se debe a la caída del coste de materias primas, que habían aumentado por la guerra de Ucrania. No obstante, existe un problema debido al aumento de los precios del combustible, y mientras siga la inflación, existe un alto riesgo de recesión.

Se está produciendo una mejora generalizada en los puertos mundiales. Se han mejorado los retrasos y los muelles no están tan saturados, mientras los proveedores de servicios logísticos negocian nuevos acuerdos para seguir progresando. Además, los transportistas han incrementado el uso de Blank Sailing¹ para evitar la caída de los fletes. Las importaciones asiáticas y norteamericanas continúan siendo fuertes. Estos meses han bajado con respecto a años anteriores, pero se espera que se mantenga en los mismos niveles. Se acerca la temporada alta por la “vuelta al cole”, que empujará a las compañías logísticas a cargar los fletes.

Esta escasez de contenedores y su incremento de precio, se debe al propio uso del Blank Sailing, el oligopolio en el sector y a una falta de legislación efectiva. Además, en los puertos europeos y estadounidenses se han producido múltiples huelgas laborales y negociación de contratos. No se contempla una normalización total de la situación, pero tampoco se van a mantener los niveles tan bajos que se han visto estos últimos años. Todo esto gracias a que China eliminó las restricciones por COVID, así como la caída del precio de los fletes.

1. Blank Sailing. También conocida como salidas en blanco, es una práctica utilizada por las navieras. Un barco para por distintos puertos antes de llegar a su destino final, y en estos puertos se produce una carga y descarga de mercancía. Cuando alguno de esos puertos está saturado se decide no parar en él y dejarlo atrás. Es la cancelación de la escala de un buque.